lunes, diciembre 05, 2011

Actuar

Del actuar cristiano en la Teología de la Liberación, otro extracto:

Así el actuar cristiano no puede limitarse al asistencialismo benéfico (dar alimentos), ni tampoco al desarrollismo paternalista (ayudar a la promoción de los países subdesarrollados, hasta que puedan imitar a los países desarrollados), sino (que debe) apoyar al pueblo en sus organizaciones para conseguir una transformación estructural en orden a una sociedad justa y libre.

Esta es la forma de actuar que Puebla propone, siguiendo al Vaticano II:

Es de suma importancia que el servicio de los hermanos vaya en la línea que nos traza el Concilio Vaticano II:

1) Cumplir, antes que nada, las exigencias de la justicia, para no dar como ayuda de caridad lo que ya se debe por razón de justicia;
2) suprimir las causas y no sólo los efectos de los males;
3) organizar los auxilios, de tal forma que quienes los reciben se vayan liberando progresivamente de la dependencia externa;
4) y se vayan bastando por sí mismos (Puebla 1146)


Exégesis

Extracto de ¿Qué es la Teología de la Liberación?, hablando de la lectura del Éxodo, desde América Latina:

El Éxodo leído desde un continente no sólo subdesarrollado sino oprimido, en situación de dependencia y esclavitud, resuena con un acento peculiar y revela que esta profunda experiencia de Dios aconteció en un hecho social y político. Israel vivía en situación de opresión (Ex 1, 10-11; 3, 7; 20, 2), en medio de un trabajo alienante (Ex 5, 6-24), humillante (Ex 1, 13-14), bajo un Faraón que propiciaba una política antinatalista (Ex 1, 15-22). En esta situación, Dios no toma una postura neutral, sino que escucha el clamor del pueblo, se revela a Moisés como el Dios de la vida y se opone al Faraón (Ex 3). Este Dios libera al pueblo con brazo poderoso, en medio de señales y prodigios (Ex 13-15). Dios salva y libera al pueblo de forma total y la fe de Israel (Alianza, Mandamientos, Pascua, Comunidad...) no podrá olvidar este acontecimiento del Dios liberador. Israel no deberá prostituirse a otros dioses de muerte, ni tampoco volver a esclavizar a sus hermanos. Los profetas precisamente vuelven a recordar esta fe liberadora de Israel, en los tiempos en que el pueblo está tentado tanto a caer en la idolatría como en la injusticia.